Carlo Ancelotti se la juega. Con el Chelsea a 12 puntos del Manchester United en la Premier, y tras la eliminación ante el Everton en la Copa Inglesa el pasado sábado, crece la presión contra el técnico italiano, que vivirá el duelo de Champions ante el Copenhague, este martes a las 19:45 horas GMT, como un auténtico ultimátum.La máxima competición continental es el único asidero del cuadro londinense para salvar la temporada, toda vez que las expectativas del multimillonario Roman Abramovich no se han cumplido. Ni siquiera el formidable gasto en el mercado de invierno para contratar a Fernando Torres y el central portugués David Luiz han parado el golpe. El técnico, que asegura no pensar en la dimisión, sí reconoce que sólo dos o tres de sus jugadores están rindiendo al nivel que se les supone.
"No caeremos ante el Copenhague", se anima Ancelotti, que ve en estos partidos la motivación adecuada para sus futbolistas. "Ahora, tenemos que encontrar nuestro nivel, estar juntos y trabajar duro. Quizás este partido sea un buen momento para empezar a tener buenos resultados y mantener la temporada viva". Ancelotti no ve la Champions como un objetivo inalcanzable: "Conquistar la Champions no es fácil, pero es un reto que nos motiva", afirma.
Pero Ancelotti, en tono desafiante, se niega a oír hablar de dimisión ni destitución. "Yo no soy quien tiene que considerar mi posición. Eso es cosa del dueño del club. Yo estoy aquí para trabajar y dar lo mejor".
Ancelotti no se mordió la lengua a la hora de valorar qué futbolistas están respondiendo a las expectativas de juego. "¿En este momento? Ivanovic está jugando con consistencia. Y John Terry. Los demás, en este momento, no están jugando al cien por cien", señaló, con los nombres de Frank Lampard y Didier Drogba de fondo.
Y también el de Fernando Torres, aún en periodo de adaptación al club de Stamford Bridge tras protagonizar un traspaso de 50 millones de libras en el pasado mercado de invierno. El delantero madrileño regresará a la Champions en el Parken Stadium de Copenhague, donde será titular si no hay contratiempos. Ancelotti tiene claro que necesita al '9' para volver a encontrar al mejor Chelsea.
Copenhague será la primera estación para el inicio del despegue que esperan Ancelotti y los suyos. Enfrente, un grupo que no ha jugado partidos competitivos desde el pasado diciembre y que ha alcanzado por primera vez en su historia la fase de octavos. De Abramovich abajo todos parecen de acuerdo. Para el Chelsea, caer en Copenhague sería una humillación.
"No caeremos ante el Copenhague", se anima Ancelotti, que ve en estos partidos la motivación adecuada para sus futbolistas. "Ahora, tenemos que encontrar nuestro nivel, estar juntos y trabajar duro. Quizás este partido sea un buen momento para empezar a tener buenos resultados y mantener la temporada viva". Ancelotti no ve la Champions como un objetivo inalcanzable: "Conquistar la Champions no es fácil, pero es un reto que nos motiva", afirma.
Pero Ancelotti, en tono desafiante, se niega a oír hablar de dimisión ni destitución. "Yo no soy quien tiene que considerar mi posición. Eso es cosa del dueño del club. Yo estoy aquí para trabajar y dar lo mejor".
Ancelotti no se mordió la lengua a la hora de valorar qué futbolistas están respondiendo a las expectativas de juego. "¿En este momento? Ivanovic está jugando con consistencia. Y John Terry. Los demás, en este momento, no están jugando al cien por cien", señaló, con los nombres de Frank Lampard y Didier Drogba de fondo.
Y también el de Fernando Torres, aún en periodo de adaptación al club de Stamford Bridge tras protagonizar un traspaso de 50 millones de libras en el pasado mercado de invierno. El delantero madrileño regresará a la Champions en el Parken Stadium de Copenhague, donde será titular si no hay contratiempos. Ancelotti tiene claro que necesita al '9' para volver a encontrar al mejor Chelsea.
Copenhague será la primera estación para el inicio del despegue que esperan Ancelotti y los suyos. Enfrente, un grupo que no ha jugado partidos competitivos desde el pasado diciembre y que ha alcanzado por primera vez en su historia la fase de octavos. De Abramovich abajo todos parecen de acuerdo. Para el Chelsea, caer en Copenhague sería una humillación.
http://www.elmundo.es/elmundodeporte/2011/02/21/futbol/1298282633.html
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